Un mundo aparte es la novela-testimonio que Gustaw Herling-Grudzinski escribió sobre los dos años que pasó en el campo de trabajo de Arkangelsk en el Gulag soviético. Pero este libro no es únicamente un testimonio del horror, sino también una obra que analiza el sufrimiento humano en clave de piedad y esperanza. Su autor escribió esta obra en polaco entre julio de 1949 y julio de 1950, coincidiendo con una estancia en Inglaterra. En 1951 la editorial londinense Heinemann publicó la versión inglesa con un prólogo de Bertrand Russell. Era uno de los primeros testimonios del horror en los campos de trabajo soviéticos, por lo que su autor fue objeto de una auténtica caza de brujas por parte de la izquierda europea que negaba la existencia de los campos. En 1953 apareció la primera edición en su lengua original publicada por la editorial polaca en el exilio Kultura. En Francia, ninguna editorial tuvo el valor de publicarlo a pesar de que los derechos se compraron varias veces y de que Camus recomendó el libro a varios editores, aun así el libro tardó más de treinta años en publicarse allí. En 1990 pudo por fin publicarse en Rusia y en Polonia, donde durante décadas había encabezado el índice de libros prohibidos por el régimen comunista. Esta edición presenta por primera vez al lector español el texto traducido directamente del polaco.
«Este libro tendría que ser publicado y leído en todos los países, tanto por lo que es como por lo que dice.» Albert Camus, 1956
«De los muchos libros que he leído sobre experiencias de las víctimas de las cárceles y campos de trabajo soviéticos, Un mundo aparte, de Gustaw Herling-Grudzinski, es el más impresionante y mejor escrito. Este libro posee una extraña fuerza descriptiva, sencilla y vívida, y es absolutamente imposible dudar de su sinceridad en todos los aspectos.» Bertrand Rusell, 1951
«Un mundo aparte es un testimonio, una especie de reportaje de genial precisión sobre los campos soviéticos de la región de Kargópol, en los bosques del Gran Norte, en el período 1940-1942.» Jorge Semprún, 1985
«Un mundo aparte, de Gustaw Herling-Grudzinski, es uno de los primeros testimonies de la vida y la muerte en la red soviética de prisiones y campos de trabajo y uno de los más poderosos.» The New York Times