Este impresionante testimonio surge de las entrevistas de Gitta Sereny a Franz Stangl, comandante de los campos de exterminio de Sobibor y de Treblinka. Durante más de setenta horas, a partir de 1972, cuando Stangl se encontraba en prisión tras ser juzgado por genocidio, la autora no sólo le entrevistó a el, sino también a miembros de su familia, a sus amigos, a las personas que el encontraron en su escondite en Brasil y a supervivientes de los campos de concentración. A través de ellas el lectro se enfrenta a una de las cuestiones fundamentales del Holocausto, la banalidad del mal, el hecho de que actos de tal horror y crueldad fuesen obra de hombres ordinarios.
Definido por Stephen Vizinczey como "el más absorbente e iluminador libro sobre el genocidio nazi", este libro, estructurado a partir de una inteligente combinación de entrevistas e investigación bibliográfica y de archivo tiene la virtud de enfocar desde una perspectiva completamente nueva uno de los episodios más funestos del siglo XX, y lo hace no sólo desde el punto de vista histórico y ético, sino intentando penetrar en la psicología de los verdugos, lo que lo convierte en un libro absolutamente único.