Es un novedoso ejercicio de historia cultural, sobre la construcción de la identidad y de la alteridad en el imaginario griego, que concibieron a los persas aqueménidas como a los bárbaros por antonomasia, e inauguraron una construcción de la identidad occidental etnocéntrica y recelosa del mundo oriental..A través del análisis de la institución de la realeza, de las luchas fratricidas por la sucesión, del papel de las mujeres, los eunucos de la corte y las conjuras del harén, de la religión de los persas y de su Gran Rey, de su papel discutible en la guerra o de sus excesos de sobremesa y sus volubilidad ante el lujo, se vislumbra cómo en la mayoría de casos lo que se pretendió desde la tradición clásica fue minimizar o ridiculizar a los persas aqueménidas que era una manera denigratoria de cauterizar la angustia y el miedo provocados por la amenaza del poderoso vecino de oriente, de Asia.