Charlotte Mielswetzski tiene trece años y es una niña espabilada y muy imaginativa, aunque no demasiado popular y que no lo pasa bien en el colegio, pero sabe salir de cualquier apurillo echándole un poco de inventiva y cuenta unas historias estupendas. Un día encuentra un gatito y ése hallazgo es la señal de partida de que todo lo que constituye su mundo va a cobrar una dimensión radicalmente nueva.
Anne Ursu, autora de dos elogiadas novelas para adultos, firma aquí un texto excelente, sombrío y hasta terrorífico en ocasiones, salpicado de un humor seco que hará las delicias de los lectores de más edad. El material de partida, los dioses y mitos de los antiguos griegos, está manejado con inmensa habilidad; en todo momento resulta cercano y creíble.