No se trata sólo de escribir buenos libros, sino de escribir buenos libros interesantes porque son distintos. Esta es la apuesta de Órbita, un libro con un orden narrativo propio que busca la representación de las perplejidades y de las fantasmagorías de las sociedades capitalistas de última generación. En el relato que da nombre al libro, Miguel Serrano aborda el misterio de las relaciones humanas en la era del simulacro y del afterpop. El adolescente superdotado Samuel Soriano es casi un alienígena emocional y el extraño científico Bernardo R. es la inteligencia desajustada, la inteligencia errante. Serrano tiende a la construcción de tramas de orden alegórico, tal vez por influencia kafkiana. La historia de Samuel Soriano es una historia kafkiana, pero ajustada al siglo XXI. También está próximo Serrano a la narrativa de Roberto Bolaño. Se percibe en la estructura de los relatos y en la presencia de personajes salidos de los sótanos de la posmodernidad. El fantasma que nos habla en "Perspectivas" o el profesor de matemáticas enloquecido que aparece en "Y así sucesivamente" recuerdan el ambiente amenazador de malentendidos simbólicos de 2666. Miguel Serrano busca cómplices inteligentes. Busca rebeldías paralelas. Busca la expresión de un mundo en sombra, un mundo naciente, el mundo de la sensibilidad de un escritor español joven que tiene un compromiso radical con la literatura.