En El maestro y las magas, libro que completa la autobiografía del autor junto con La danza de la realidad, Jodorowsky relata cómo conoció al maestro jampones Ejo Takata, que lo inició en la meditación, en el budismo zen y en la enseñanza que transmiten los koans.
A pesar de que Jodorowsky se inició en la meditación y el estudio zen de la mano del maestro japonés Ejo Takata, la aplicación de estos conocimientos en la vida la aprendió de un reducido grupo de mujeres («magas») que nada tenían que ver con el budismo.
En este libro nos habla de la escritora y pintora surrealista Leonora Carrington; de Doña Magdalena, que le enseñó el masaje iniciático; de la poderosa actriz mexicana la Tigresa; y de Reyna D#Assia, hija del ocultista G.I. Gurdjieff. Pero en la vida del autor también hubo otras magas: la sacerdotisa de los hongos María Sabina, la curandera Pachita o la cantante chilena Violeta Parra, sobre quienes escribió en La danza de la realidad y Psicomagia.