Existen hoy poderosas razones para cultivar nuevas direcciones en la educación y, por tanto, nuevas maneras de entender el hecho educativo. Al vivir en pluriculturalidad tenemos que examinar con la debida atención las discrepancias, a veces notorias, en creencias y valores, las sorprendentes rarezas, ideas, pretensiones e ideales que acompañan a la diversidad cultural del alumnado. Partiendo de la diversidad cultural de los alumnos, esta obra colectiva reflexiona sobre la necesidad de transmitir un humanismo cívico o una orientación general responsable en el nuevo contexto social, a partir del utillaje antropológico.