Esta obra analiza las celebraciones (programas de fiestas, decoraciones que adornaban la ciudad, carros que desfilaban en las procesiones...) que por orden de la corona se realizaban con motivo del nacimiento, la boda, la proclamación y la defunción de algún miembro de la familia real, así como las que celebraban por precepto de la iglesia como la canonización o beatificación de santos y las motivadas por catástrofes naturales.