El año mil y la paz de Dios constituyen un capítulo de la historia de Francia. Entre el año 980 y el 1060 aproximadamente se situó el momento más “feudal”. El mundo, la sociedad, eran tan bárbaros que las gentes fueron presa de terrores (el año mil), a menos que la Iglesia los organizara en torno a ella en la paz de Dios. Esto es lo que encontramos en la mayoría de los libros. ¿Es cierto? Las fuentes son difíciles y dispersas, muy insuficientes. Se suele tomar como guía al monje Raúl Glaber, autor de cinco libros de Historias y el único entre todos los cronistas que concedió un lugar al milenio de la vida de Cristo (1000-1033). Así pues, el año mil de los historiadores modernos transcurre esencialmente “en las Galias”, porque de ello es de lo que habló Raul Glaber. Es de ello de lo que, a su vez, les conduce a hablar. Es también la trampa que les tiende involuntariamente. Sin lugar a dudas, esta obra constituye una excelente aportación en este sentido por cuanto contribuye a rescatar y analizar con una mirada nueva los acontecimientos, espacios y circunstancias de paz en uno de los momentos más conflictivos de nuestra historia europea: la Edad Media cristiana.