En esta guía, además de recoger toda la información de una guía de viajes convencional, se hace hincapié en dos aspectos puntuales: las aficiones del viajero que decide visitar Japón, y su sed de conocimientos. Así, además de pequeños incisos culturales a lo largo de toda la obra, que responden a los primeros interrogantes que se plantea el viajero recién llegado al país es fácil obtener información de dónde encontrar una deseada serie de manga, cuándo y dónde ver un combate de sumo, o localizar el escenario de aquella película que tanto nos impresionó. Para ello, los autores nos informan de cómo organizar el viaje y nos demuestran que para recorrer el país no es necesario ser millonario.