En treinta y cinco epístolas, Alexander Jardine describe, con una mirada aguda y penetrante, la realidad política, las costumbres regionales, los males endémicos y el panorama literario y cultural de la España ilustrada. Publicadas originalmente en Londres, en 1788, estas cartas son un testimonio de primera mano para conocer la historia, la economía y la sociedad de nuestra nación en el último tercio del siglo XVIII. De ello da prueba el éxito cosechado por la obra, que llegó a alcanzar varias ediciones en inglés y fue traducida al alemán, aunque no se publicó en castellano a causa de la peculiar tesitura que atravesaba la monarquía borbónica, amenazada por las sombras de la Revolución Francesa.