Cuando Tim Kearney, un delincuente de poca monta, le corta el cuello a un motorista de la peña de Hell's Angel y se ganauna perpetua en una cárcel llena de colegas del difunto, sabe que es hombre muerto. Hasta el día que la DEA le hace una jugosa propuesta: la libertad a cambio de suplantar al legendario traficante de drogas Bobby Z y ser la moneda de cambio que permita a la agencia recuperar a uno de sus agentes. Quien hace la oferta es Don Huertero, el mayor señor de la droga del norte de México. La acción comienza con una trepidante huida a través del desierto. Pisándole los talones el FBI, un enjambre de motoristas, señores de la droga e indios americanos expertos en rastros.