En 1829 Alexandr Pushkin acompañó al ejército ruso en su marcha por el Cáucaso, Georgia y Armenia, hasta la ciudad de Arzrum (Erzurum). Uno de los alicientes para emprender el viaje era volver a ver a los amigos que tras la conspiración liberal de 1825 habían sido represaliados y enviados a luchar contra los turcos. El viaje a Arzrum, que supuso un cambio de rumbo en la obra del escritor, revela la honda impresión que aquellos paisajes causaron en Pushkin, así como la ambigua fascin ación que sintió por los pueblos que las tropas imperiales encontraban a su paso. Publicado en 1836 en la revista Sovreménnik, es un valioso testimonio de los antagonismos que han marcado la convulsa historia de esas tierras de frontera.