En 1933 el escritor irlandés Maurice Walsh atrajo la atención del director John Ford, al publicar en Estados Unidos El hombre tranquilo. La historia del boxeador norteamericano que regresa a su Irlanda natal para hallar la paz, y la encuentra en brazos de una mujer pelirroja de fuerte carácter, sería llevada al cine en 1952, protagonizada por John Wayne y Maureen O'Hara. Hoy, sesenta años después, el éxito de la película -uno de los grandes títulos de Ford- ha ensombrecido la novela en la que se inspiró, un bestseller internacional hasta ahora inédito en España. Aquí está la historia de amor entre el hombre tranquilo y la joven pelirroja, pero hay mucho más: una naturaleza exhuberante donde pervive la leyenda, y la amistad de un grupo de hombres y mujeres que han luchado en el ira por la independencia de su país.