Hoy he dejado la fábrica, «esta especie de diario de compañías y soledades», es quizás uno de los textos más personales del autor hasta el momento, un compendio de microrrelatos que funcionan como ventanas a la psique del autor, a sus miedos, recuerdos, vivencias, sueños y pesadillas. Un juego de luces y sombras en el que el escritor juega a confundir al lector, que transitará estas páginas en un irremisible estado de duda, asaltado por realidades y fantasías.