En junio de 2006 el anciano Allan Chappelow, un reputado fotógrafo y experto en George Bernard Shaw, fue encontrado en su casa londinense bajo una montaña de papeles y desperdicios. Lo habían golpeado brutalmente hasta matarlo. Casi tres años después, Wang Yam, un disidente político chino, fue declarado culpable de su asesinato. Ambos acontecimientos enmarcan uno de los más intrigantes rompecabezas criminales a los que se ha enfrentado jamás la policía y la justicia británicas, en el que se mezclaron el sexo furtivo, la usurpación de identidad, patologías extrañas e incluso asuntos de seguridad nacional. A partir de los hechos públicos y otros datos que no llegó a conocer la policía, Thomas Harding reconstruye un caso que llevó a las autoridades a una decisión inusual: fue la primera vez que un juicio inglés se celebró a puerta cerrada. «Páginas de sangre es el A sangre fría de nuestro tiempo». TONY PARSONS