Si hay una ciudad en el mundo en la que el movimiento anarquista ha arraigado y ha sido realmente importante, esa ciudad es Barcelona. Entre 1936 y 1939, en un tiempo de máxima convulsión política, vivió unos años de esplendor cuando, igual que en el resto del país, se instauró una revolución social. Este libro fotográfico muestra la vida cotidiana, social y económica de una revolución que había quedado arrinconada en nuestra memoria, y lo hace a través de unas fotografías que han estado mucho tiempo cerradas en cajas y que, gracias a este libro, han empezado a salir a la luz.