Una vida de contrastes es el libro de memorias de Diana, la tercera de las seis hermanas Mitford (las otras cinco son Nancy la novelista, Pamela la experta en aves de corral, Unity la amante de Hitler, Jessica la comunista y Deborah la duquesa). Se narra aquí su matrimonio con Bryan Guinnes, una de las mayores fortunas de Inglaterra, pero sobre todo la relación con Sir Oswald Mosley, del que sería amante y con el que, una vez viudo, contraería matrimonio en 1936... ¡en casa de Goebbels! Mosley entonces era el líder del partido nazi británico, por lo que Winston Churchill –tío de Diana- los envió a ambos tres años a la cárcel, una experiencia, según ella, “bastante incómoda”. Según el Sunday Times es una obra que se lee como una conversación brillante; sus personajes viven o mueren en una simple frase, le gusta reírse del lector con juicios indignantes y es por naturaleza incapaz de ser aburrida. Tiene esa facilidad para el absurdo que solo es posible desarrollar en grandes familias conversadoras, donde esos tesoros se guardan y se intercambian. Una autobiografía en verdad diferente.