Una de las joyas más delicadas del universo narrativo de Stefan Zweig.
En la Viena de 1900, el prestigioso pianista Stefan Brand 02013;un gran seductor, poco dado al compromiso02013; recibe una carta de una mujer cuyo nombre no le dice nada. El tono apasionado de la carta le fascina y le sorprende a la vez: aquella mujer lo conoce muy bien y, sin embargo, para él, ella es una auténtica desconocida.